La Cámara de Senadores, mediante una Declaración Camaral, rechazó las maniobras y agravios en contra del Estado Plurinacional de Bolivia, cometida por un grupo de representantes de Estados miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA), quienes desconocieron la Presidencia legítima de Bolivia y Vicepresidencia de Haití” el pasado 3 de abril en el Consejo Permanente de este organismo multilateral.

El documento refiere que el “único propósito” de desconocer la Presidencia de Bolivia del Consejo Permanente fue “aprobar por la fuerza una Resolución en contra de la República Bolivariana de Venezuela, vulnerándose los principios y normas que rigen a este organismo internacional”.

La Cámara de Senadores exige “que la actuación de este organismo internacional se ajuste a la normativa que regula su funcionamiento y que promueva entre los Estados miembros, el respeto a los principios de libre determinación y no intervención en los asuntos internos, como parte esencial del reconocimiento de la soberanía de los Estados”.

La Declaración Camaral insta al Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia y la representación permanente de Bolivia ante la OEA que “con firmeza continúe defendiendo la dignidad y los derechos del país, ante cualquier intento de menoscabo de nuestra soberanía”.

La Declaración Camaral N° 050/2017-2018 fue aprobada el pasado 25 de abril por el pleno del Senado a propuesta de la jefa de bancada nacional del Movimiento Al Socialismo (MAS) en la Cámara de Senadores, Nélida Sifuentes Cueto.

Asimismo, el documento refiere que Bolivia actuó en aquella ocasión conforme a derecho en el marco de la institucionalidad de la OEA, lo que significa que la convocatoria no fue cancelada sino suspendida con el propósito de consensuar la resolución sobre Venezuela y posteriormente convocar a la reunión.

Sin embargo, mientras se realizaban las consultas, indica la Declaración Camaral, un grupo de países encabezados por Estados Unidos, Canadá, México, Chile, Paraguay y Argentina desconocieron por la fuerza a la Presidencia de Bolivia y la Vicepresidencia de Haití, y realizaron una convocatoria express e instalaron una sesión ilegal.

También se indica que Bolivia como un país soberano defendió con firmeza la dignidad y los derechos, reafirmó su amplia predisposición de diálogo, de concertación y de transparencia, no acepta ni aceptará agresiones ni imposiciones de ningún país.

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