La Cámara de Senadores rinde homenaje a la empresa industrial "Empanadería Wist’upiku", fundada por María Blanca Soliz, en conmemoración de sus 84 años de existencia y por su destacada contribución a la gastronomía boliviana.
El nombre Wist´upiku, de origen quechua y que significa “Picho Chueco”, fue adoptado de manera peculiar. Aunque no se conoce exactamente quién le dio el apodo al dueño de la panadería, este se mantuvo y, junto a su pareja, decidieron darle ese nombre al negocio.
En 1998, la empresa expandió sus horizontes con sucursales en La Paz, en el año 2000 en Santa Cruz y posteriormente, en 2020, en la ciudad de Sucre. No obstante, en Santa Cruz, las ventas no cumplían las expectativas, por lo que se tomó la decisión de incorporar empanadas de charque, carne y pollo, logrando un gran éxito en el departamento.
Tras el fallecimiento del señor José Soliz Vaca a los 79 años, ocurrido 30 años después de la apertura de "Wist’upiku", su esposa continuó liderando el negocio en la calle Lanza de la ciudad de Cochabamba. Con el tiempo, sus hijos brindaron su apoyo, permitiendo así la expansión del negocio a diferentes departamentos del país.