La presidenta de la Cámara de Senadores, Adriana Salvatierra, explicó que el informe presentado, este miércoles, por la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), sobre los comicios electorales en el país, es sólo preliminar, además de calificar como un exceso de atribuciones, toda vez que la normativa electoral en Bolivia es clara en cuanto al procedimiento de un balotaje.  

“Lo que ha mencionado la OEA, es un informe preliminar de la Misión de observadores, por tanto, no es una resolución”, señaló la autoridad, al mencionar que este informe es un tanto confuso al evidenciar un exceso en sus facultades.

De acuerdo al informe, en el caso de que la diferencia, entre candidatos del primer y el segundo lugar, sea superior a los diez puntos, la OEA recomienda una segunda vuelta, lo que para Salvatierra es un absoluto contrasentido y un exceso de atribuciones que no le han sido conferidas a esta instancia internacional.

“Nuestra norma es clara, si se da una diferencia del diez por ciento o más, entre la primera y la segunda fuerza política no habría una segunda vuelta y una misión de observadores no puede interpretar las leyes, ellos solo pueden opinar sobre temas de forma y sobre cómo se desarrolla la elección”, señalo Salvatierra, durante una entrevista en radio Panamericana.  

Para la legisladora, es importante resaltar que la misma declaración de la OEA señala que no hubo fraude y además aceptan realizar una auditoría total del proceso electoral, un pedido expreso que realizó el gobierno nacional, a través de la Cancillería.

“Esperamos que se realice esta auditoría, estamos seguros que ese informe será positivo, porque no hubo ninguna manipulación de los resultados”, acotó.

Destacó también, el informe de acompañamiento electoral de la misión de los Euro Diputados que ratifica que las elecciones se realizaron de forma transparente y de acuerdo a las normas.

Lamentó, que ante la inminencia de los resultados, existan intereses de forzar una salida “política” y eso no existe; lo que se debe hacer es permitir que los Tribunales, terminen el conteo de votos. Pero las acciones contradictorias, como la quema de instalaciones de los Tribunales en diferentes regiones, muestran que solo se pretende interferir el trabajo.