De Lineth Guzmán Wilde
Senadora Nacional
Si alguien me hubiese preguntado hace diez años atrás ¿Cuál era mi sentimiento en un 23 de marzo? Un nudo en mi garganta se me hubiera quedado. Porque hace años atrás tenía un sentimiento de tristeza, coraje e impotencia. Sin embargo, si alguien me preguntara; ¿Cuál tu sentimiento en este 23 de marzo? Yo le respondería con gran alegría; de que dimos un gran paso importante, para retornar a nuestro mar cautivo, luego de una lucha incesante tengo el valor de decir conjuntamente con mis compañeras y compañeros a viva voz el “¡¡¡Mar nos pertenece!!!” y es de conocimiento de todos los países del mundo, por lo que ellos conjuntamente con nosotros reclaman que tenemos un derecho legítimo de acceso al mar con soberanía. Y ello se plasma en la admisión de nuestra demanda en la Haya, donde nuestros representantes fueron a de defender con fundamentos sólidos y la documentación que respalda nuestra petición porque los bolivianos somos Patriotas, sin embargo esta lucha por un derecho soberano al mar lo han sabido llevar adelante los representantes de nuestra País, ante los representan en la Haya. Asimismo se hace necesario recordar que en el año 1879, nuestro País de Bolivia sufrió una invasión, por parte de los chilenos a nuestro territorio, es por esta situación de la pérdida de nuestro territorio del Litoral, con una extensión de aproximadamente 120.000 kilómetros cuadrados con costas al océano Pacifico, no por una Guerra como se quiere hacer creer, puesto que la guerra del Pacifico, fue declarado posteriormente a ser invadido nuestro territorio, el mismos que involucro a tres partes: Bolivia y Perú contra Chile.
Empero también ser hace necesario recordar que el conflicto tiene sus orígenes, por un interés de los recursos naturales, como ser el guano y el salitre, posteriormente el cobre, que por detrás de estos existía un interés de la oligarquía inglesa, iniciado luego de la caída del colonialismo español y el nacimiento de las repúblicas independientes ya mencionadas, herederas del Virreinato de Lima y la Audiencia de Charcas. A partir de 1832, se sumaron una serie de intereses políticos, militares y económicos, que llevaron al enfrentamiento cuando no teníamos las condiciones.
Estas enseñanzas de la guerra del Pacífico y tantas guerras más que pasamos nos traen lecciones de vida en la que rememoramos, reflexionamos y proponemos como reivindicarnos, pero por sobre todo sabemos que ahora nuestra sociedad es más unida, luchadora de pelear con ideas por lo que nos pertenece históricamente, documentalmente, y queda grabado en nuestras memorias que nunca más nos dejaremos, porque está en nuestra vida un espíritu patriota que ama a su país y queremos una justicia social, equitativo para el mundo.
Y como boliviana y bolivianos tenemos el orgullo y la frente en alto, para decir que pronto retornaremos a nuestro mar cautivo. ¡…Que viva el 23 de marzo..!, ¡Retornar al mar es un derecho… recuperarlo es un deber!
HONOR Y GOLORIA A LOS HEROES DEL PACÍFICO